Tomando en cuenta el crecimiento entre el tercer y cuarto trimestre de los últimos años, estimamos que en 2022 Yeti estaría superando los $1,600 millones de dólares en ingresos, que implicaría un crecimiento de más de 250% desde 2015.

En sus inicios, la misión de Yeti era la de construir la hielera ideal para los entusiastas del outdoor. Conforme han crecido, la categoría de Drinkware, que incluye desde los famosos termos hasta tazas y vasos de vino, se ha convertido en la principal fuente de ventas, por encima de las propias hieleras.

No solamente se han hecho más grandes — se han vuelto más autónomos. Su canal de ventas directas es cada vez más y más relevante, lo que les permite depender en menor medida de socios comerciales (y les ofrece mejores márgenes).

Esto es probablemente el punto medular en la historia de la empresa. Lograron posicionarse como la marca más prestigiosa, y capturan este valor en el precio de sus productos.

A pesar de un retroceso en este último año por problemas en la cadena de suministro y la inflación global, el rápido crecimiento de Yeti ha sido bien recibido por el público inversionista. Hizo su IPO en 2018, a un precio aproximado de $17 dólares por acción. Para 2021, esto se había disparado hasta los $107 dólares.